¡Bienvenidos apasionados del bricolaje! En estos tiempos de pandemia, se ha vuelto fundamental contar con elementos de protección que nos permitan cuidarnos y protegernos. En este sentido, las caretas o máscaras protectoras se han convertido en un artículo indispensable para evitar el contagio de enfermedades respiratorias.
¿Por qué hacer una careta o máscara protectora?
Una de las ventajas de hacer una careta o máscara protectora es que podemos personalizarla a nuestro gusto y adaptarla a nuestras necesidades. Además, puede resultar mucho más económico que comprar una ya hecha.
¿Qué materiales necesitamos?
Los materiales necesarios para hacer una careta o máscara protectora son:
- Plástico transparente o acetato (preferiblemente de 0.5 mm de grosor)
- Goma espuma o esponja
- Cinta adhesiva doble faz
- Tijeras
- Perforadora
- Elasticos
- Regla y lápiz
¿Cómo lo hacemos?
Una vez que tenemos los materiales necesarios, podemos empezar a construir nuestra careta o máscara protectora. Para ello, seguiremos los siguientes pasos:
Paso 1: Cortar el plástico
Cortamos el plástico a la medida deseada. Lo recomendable es que tenga una altura de unos 25 centímetros y un ancho de unos 35 centímetros.
Paso 2: Cortar la goma espuma
Cortamos dos tiras de goma espuma o esponja del mismo tamaño que el plástico que acabamos de cortar. Estas tiras serán las que nos permitan ajustar la careta a nuestra cabeza.
Paso 3: Pegar las tiras de goma espuma
Ponemos cinta adhesiva doble faz en las tiras de goma espuma y las pegamos al plástico, en los extremos inferiores. Es importante dejar suficiente espacio entre una tira y otra para que la careta se adapte a cualquier medida de cabeza.
Paso 4: Realizar los agujeros
Con la perforadora, hacemos dos agujeros en los extremos superiores del plástico.
Paso 5: Pasar los elásticos
Pasamos los elásticos por los agujeros que acabamos de hacer y los sujetamos con un nudo.
¡Listo para usar!
Una vez que hemos seguido todos los pasos, nuestra careta o máscara protectora ya está lista para usar. Ponemos la careta en nuestra cabeza y aseguramos los extremos inferiores con las tiras de goma espuma o esponja que hemos pegado. Si queremos mejorar la seguridad de nuestra careta, podemos añadir más cinta adhesiva doble faz en los extremos inferiores para que quede más firme.
Conclusión: Hacer una careta o máscara protectora es sencillo y económico. Al hacer nuestra propia careta podemos personalizarla y adaptarla a nuestras necesidades. Además, nos permite cuidarnos y protegernos en estos tiempos de pandemia.
Redactora área jardín & barbacoa
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