Los zócalos son elementos que se colocan en la base de las paredes para protegerlas y añadir un estilo decorativo. Pero, ¿sabías que no todos los zócalos tienen la misma altura? En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre zócalos en diferentes alturas.
¿Por qué colocar zócalos?
Antes de hablar sobre las diferentes alturas de los zócalos, es importante analizar su utilidad. La principal función de los zócalos es proteger la base de las paredes de posibles golpes o roces que puedan ocasionar daños en la pintura o el revestimiento. Además, también contribuyen a mantener una buena higiene en la casa, evitando que el polvo y la suciedad se acumulen en las zonas más bajas de las paredes.
Pero además de su utilidad práctica, los zócalos también son una opción estética muy interesante. Al elegir un tipo de zócalo con un diseño llamativo o un color que contraste con el resto de la pared, se puede conseguir un efecto decorativo muy interesante. Los zócalos también pueden ser utilizados para dividir visualmente los espacios, por ejemplo, si se coloca un tipo de zócalo en un área determinada y otro tipo diferente en otra zona de la misma estancia.
Zócalos en diferentes alturas
Uno de los aspectos más interesantes de los zócalos es que no tienen por qué tener siempre la misma altura. Es decir, se puede elegir un zócalo más o menos alto dependiendo del efecto estético que se quiera conseguir y también dependiendo del uso que se le vaya a dar al espacio.
Por ejemplo, en una cocina o un baño puede resultar interesante colocar un zócalo más alto que en otras estancias de la casa, ya que estas son zonas en las que se generan más humedad y suciedad. Un zócalo alto asegurará que esas zonas estén protegidas al máximo y que la limpieza resulte más sencilla.
Por otro lado, en una habitación infantil puede ser muy interesante colocar un zócalo más bajo, para que los niños puedan dibujar o pintar en la pared sin sobrepasar el límite del zócalo.
Zócalos bajos
Los zócalos bajos suelen colocarse a una altura de entre 5 y 10 centímetros del suelo. Este tipo de zócalo suele ser suficiente para proteger la base de las paredes de posibles golpes y también para mantener la higiene en la zona. Pero además, los zócalos bajos también son muy apreciados por su valor decorativo, ya que pueden ayudar a crear un estilo moderno o minimalista.
En general, los zócalos bajos funcionan muy bien en ambientes relajados y en áreas en las que no se espera mucha actividad. Por ejemplo, en una sala de estar o en un dormitorio suelen quedar muy bien los zócalos bajos.
Zócalos medianos
Los zócalos medianos se colocan a una altura de entre 10 y 20 centímetros del suelo. Este tipo de zócalo es el más utilizado en hogares de todo el mundo, ya que ofrece un buen equilibrio entre protección y valor estético.
Los zócalos medianos son muy versátiles y pueden adaptarse a cualquier tipo de ambiente, desde habitaciones infantiles hasta cocinas o baños. Además, este tipo de zócalo también puede ayudar a crear una sensación de continuidad entre las paredes y el suelo, lo que aporta una sensación de amplitud y luminosidad al espacio.
Zócalos altos
Los zócalos altos se colocan a una altura de entre 20 y 30 centímetros del suelo. Este tipo de zócalo es muy utilizado en baños, cocinas y otras zonas en las que se requiere una protección extra contra la humedad y la suciedad.
Además de su utilidad práctica, los zócalos altos también pueden ser utilizados para crear un efecto decorativo muy interesante. Por ejemplo, si se elige un tipo de zócalo con un diseño llamativo, se puede añadir un toque de personalidad al espacio.
Conclusión
Como hemos visto, los zócalos son elementos muy útiles y versátiles que pueden influir de manera significativa en el estilo decorativo y la funcionalidad de un espacio. Dependiendo del uso que se vaya a dar al espacio y del efecto estético que se quiera conseguir, se pueden elegir zócalos bajos, medianos o altos.
En cualquier caso, es importante elegir un tipo de zócalo con una calidad óptima y una buena resistencia, para que cumpla adecuadamente su función práctica y decorativa.
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