Quitar el gotelé de las paredes de tu hogar puede parecer una tarea difícil y engorrosa, pero con las herramientas y técnicas adecuadas, se puede lograr un resultado profesional sin necesidad de contratar a un especialista.
¿Qué es el gotelé?
El gotelé es una técnica de decoración que consiste en aplicar una pasta rugosa sobre las paredes para crear un efecto de textura. Este tipo de acabado fue muy popular en los años 80 y 90, pero con el tiempo ha perdido su vigencia y se ha convertido en un obstáculo para aquellos que buscan renovar el aspecto de sus paredes.
¿Por qué quitar el gotelé?
Además de estar desactualizado, el gotelé puede hacer que las habitaciones se vean más pequeñas, oscurecerlas y dificultar la limpieza de las paredes, ya que la textura acumula polvo y suciedad. Por estas razones, muchas personas optan por eliminar el gotelé para darle a sus paredes un aspecto más moderno y limpio.
Herramientas necesarias
Antes de comenzar a quitar el gotelé, es importante contar con las herramientas necesarias para asegurar un trabajo limpio y eficiente. Las herramientas necesarias son:
- Lija de grano grueso
- Martillo
- Tijeras
- Cúter
- Esponja
- Paleta
- Guantes de trabajo
- Mascarilla
Pasos para quitar el gotelé
Paso 1: Proteger las áreas cercanas
Antes de comenzar a trabajar, es importante proteger las áreas cercanas a la pared que se va a tratar. Utiliza cinta de carrocero para cubrir los bordes del techo, las molduras o zócalos y cualquier otro elemento que no quieras manchar o dañar.
Paso 2: Comenzar a lijar
La lija de grano grueso es la herramienta que se utiliza para quitar la textura del gotelé. Comienza por una esquina de la pared y lija toda la superficie con movimientos circulares y uniformes. A medida que vayas lijando, es probable que la superficie se torne irregular y desigual, pero no te preocupes, es normal. Lo que debes hacer es continuar lijando hasta que la mayoría de la textura del gotelé sea eliminada.
Paso 3: Humedecer la superficie
Una vez que hayas lijado toda la superficie, humedece un paño o esponja y frota la pared. Esto tiene como objetivo ablandar la pasta restante y facilitar su eliminación.
Paso 4: Eliminar el gotelé
Con la ayuda de una paleta, raspa cuidadosamente la pasta que haya quedado en la pared. Si encuentras alguna zona especialmente difícil de eliminar, humedécela de nuevo con la esponja y repite el proceso.
Paso 5: Lijar de nuevo
Una vez que hayas eliminado toda la pasta del gotelé, lija la superficie con una lija de grano medio para eliminar cualquier irregularidad que haya quedado después del raspado.
Paso 6: Reparar las grietas o agujeros
Es probable que al quitar el gotelé se hayan descubierto algunas grietas o agujeros en la pared. Repáralos con masilla para paredes y lija de nuevo una vez que la masilla esté seca.
Paso 7: Pintar o empapelar
Una vez que la pared esté lisa y sin imperfecciones, ya está lista para ser pintada o empapelada según tu preferencia. Si decides pintarla, asegúrate de aplicar una capa de sellador antes de empezar a pintar. Esto ayudará a evitar que la pared absorba demasiada pintura y evita manchas.
Conclusiones
Eliminar el gotelé es una tarea que requiere tiempo y paciencia, pero también puede ser muy gratificante. Con las herramientas adecuadas y siguiendo los pasos indicados, podrás lograr un resultado profesional y renovar las paredes de tu hogar sin tener que gastar una fortuna. Si no te sientes cómodo haciéndolo por tu cuenta, siempre puedes contratar a un especialista para que te ayude.
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